
ADN
De Marca
La importancia de transmitir la esencia, ADN de la marca


¿Puede una persona enamorarse de una marca?
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La respuesta a esta sorprendente pregunta es lo que se conoce como Top of Heart. Se utiliza para descubrir la preferencia que una persona siente por una marca en función del cariño que le tiene. Esta inclinación, casi romántica, indica que el consumidor siempre acaba comprando artículos de esa marca.
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Según Philip Kotler, padre del marketing moderno, las empresas han comenzado a priorizar el lado humano del consumidor. Esto explica el auge del aspecto emocional en las estrategias de marketing modernas. Provocar profundas emociones te puede llevar a un nivel superior, pero nunca olvides el lado irracional de nuestro corazón.
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Ambos conceptos son importantes para determinar el nivel de preferencia. No obstante, tienen sus particularidades:
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El Top of Mind es esa marca que el usuario tiene posicionada en la cabeza. De manera espontánea, otorga una posición privilegiada a la marca.
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Aun así, eso no garantiza su adquisición, porque también hay que tener en cuenta factores como precio o afecto. Esta es la característica principal del Top of Heart: lo que siente el cliente.
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Por ejemplo, cuando vas a una tienda y pides Kleenex en vez pañuelos de papel. Esto indica que la marca está posicionada en la mente del consumidor a un nivel profundo. Esto significa que sólo con pensar en las características del producto, el corazón se decanta por la marca preferida.
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En el posicionamiento Top of Heart el cariño provoca una fidelidad basada en factores emocionales más que racionales o intelectuales. La marca no está supeditada a elementos del mercado como sí lo está el Top of Mind; por lo que se emplea para aumentar las probabilidades de compra.
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Virtudes del Top of Heart
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Este concepto te ayudará a comprender las necesidades de tus clientes incluso antes que ellos mismos. Asimismo, también te proporcionará las siguientes ventajas:
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Conocimiento más profundo del cliente. No solo datos materiales, sino también pensamientos, proyecciones y objetivos.
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Humanizar a tu comunidad. Deja de ver al cliente como una cifra. Otórgale el estatus de pilar fundamental de tu negocio. Da valor a sus sentimientos, a cómo le hace sentir tu negocio.
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Potenciar la lealtad. Un vínculo estrecho con los consumidores asegura conversiones. Además, un cliente satisfecho intenta convencer a su entorno de las maravillas de tu marca.
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Amor incondicional para siempre. El comprador que queda prendado de tu producto, no lo abandona jamás. Intentará seguir contigo aunque surjan pequeñas pegas, como un aumento de precio, por ejemplo.
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Comunicación sincera y directa. Un vínculo especial permite hablar con confianza con tu público. Y este contigo. Humanizar la empresa por parte del cliente es un paso básico para fortalecer la unión.